Paso 3. Articular marca y producto
Una marca sin producto o servicio es pura promesa, y un producto sin una marca potente no construye diferenciación. Sin embargo, muchas veces la promesa de la marca no se verifica en la experiencia del consumidor.
05/06/2024
Hoy, el 65% de la Generación Z se autopercibe como “sensible y empático”, mientras el 50% de las personas con más de 40 años que fueron encuestadas los tilda de “vagos y frágiles”. La mayoría de los jóvenes de entre 15 y 25 años declara que tienen más registro de sus necesidades emocionales y sabe cómo expresarlas. Se definen como “emocionalmente conscientes”, pero para los ojos de los adultos se trata de personas vulnerables.
Mientras 6 de cada 10 jóvenes argentinos afirman haber experimentado depresión, ansiedad o angustia, en mayores de 40 esta situación se da solo en 3 de cada 10 personas. Esto indica que en la juventud hay un mayor registro y conciencia de las emociones que entre los adultos.
Hoy en día, los jóvenes construyen desde el sentir y no desde el hacer. Y esta sensibilidad los hace ponderar la realidad y relacionarse con otros de manera distinta a lo que se espera. Esta conciencia de fragilidad los ubica en el mundo con cautela, pero no les quita capacidad de acción ni motivación. Su huella es más gentil, pero no por ello menos deseante.
Este análisis surge de nuestro último estudio “Joven argentino: Desarmando mitos”, en el que buscamos desentrañar los prejuicios construidos alrededor de esta generación.
¿Cómo pueden las marcas conectar de manera genuina con esta generación? Pensar en los valores y prácticas que los caracterizan es clave para aquellas empresas que quieran convocar de manera auténtica a los jóvenes.
Para conocer más del estudio, entrá acá.
Una marca sin producto o servicio es pura promesa, y un producto sin una marca potente no construye diferenciación. Sin embargo, muchas veces la promesa de la marca no se verifica en la experiencia del consumidor.
En un mundo donde la diversidad es la norma, para que una marca sea masiva es necesario que entienda y se adapte a las múltiples realidades.
En el dinámico mundo de las marcas, la construcción y la actualización constante de la estrategia de negocio son esenciales para el éxito a largo plazo.
El ritmo actual de los negocios exige el cambio constante. En el amplio mundo de las marcas, acompañar esta transformación requiere cuidar y hacer crecer la imagen y el posicionamiento de la marca desde un lugar seguro.
Con estos 10 pasos, conocé cómo construir una estrategia sólida en contextos desafiantes.
Paso 6. Ser genuino y coherente.
En momentos donde prima la volatilidad, las marcas deben actuar con agilidad para acompañar a sus consumidores. Esto implica actualizarse y adaptarse a las demandas actuales. Pero al hacerlo, es importante respetar su esencia para que el cambio no se reduzca a un disfraz de época.
Ser genuino es honrar las raíces, el linaje, el ADN de la marca. Es conectar con la historia que la define, con los valores arraigados en cada fibra de la organización.
A su vez, la coherencia es la clave para mantener la integridad de la marca. Proviene de «cohaerere» que significa estar unido, conectar las diferentes partes para formar un todo armonioso, orgánico.
¿Qué quiere decir esto?
Que la marca no debe actuar de manera impulsiva o errática, sino seguir una trayectoria firme y congruente. De lo contrario, la promesa de marca se desdibujará y prevalecerá el oportunismo sobre sus valores reales.
En resumen, ser genuino y coherente es lograr la combinación perfecta entre legado y evolución. Esto permitirá darle vida a la marca desde su esencia más pura.